Según el Reglamento de la FEI sobre Antidopaje y Medicamentos Controlados los jinetes tienen la oportunidad de solicitar el levantamiento de la suspensión provisional ante el Tribunal de la FEI y así lo han hecho 2 jinetes de Salto, 2 de Doma, 7 de Raid y a 3 entrenadores de Raid.
Los dos jinetes internacionales de salto son el brasileño Marlon Modolo Zanotelli (que montaba a Sirene de la Motte) y el británico Henry Turrell (con Blaze of Glory II), cuyos caballos dieron positivo en la sustancia prohibida Esparteína después de competir en eventos separados en Vilamoura, Portugal el mes pasado.
La Esparteína es un antiarrítmico utilizado para tratar la arritmia cardíaca, y se encuentra en la flor de lupino, que crece en muchas partes de Portugal. Precisamente por esta razón se ha levantado la suspensión al considerar probable que los caballos pudieran contaminarse al comer estas flores durante la competición.
La Esparteína será reclasificado como Medicamento Controlado y Sustancia Especificada a partir del 1 de enero de 2018.
También debido a la reclasificación de una sustancia prohibida, se levantaron la suspensión de los jinetes y entrenadores de Raid.
Las muestras tomadas a 7 caballos que compitieron en cuatro competiciones en Al Wathba, Emiratos Árabes entre finales de noviembre de 2016 y mediados de enero de este año dieron positivo en cafeína y en una serie de metabolitos, incluida la sustancia Paraxanthine.
La cafeína está clasificada como Sustancia Especificada, es decir, es debida a la ingestión de alimentos contaminados, sin propósito de aumentar el rendimiento deportivo del caballo.
La Paraxantina también será reclasificada como Medicamento Controlado y Sustancia Especificada a partir del 1 de enero de 2018.
Los dos jinetes de Doma de Estados Unidos a los que se les ha levantado la suspensión son Adrienne Lyle (Horizon) y Kaitlin Blythe (Don Príncipe), Sus caballos habían resultado positivos a la Sustancia Prohibida Ractopamine en Wellington el pasado Febrero.
Sus suspensiones provisionales se levantaron después de la evidencia proporcionada por los dos atletas de que un suplemento alimenticio dado a los caballos había sido contaminado.
Ambos caballos están ahora pendientes de autorización para participar en el US Dressage Festival of Champions.